En México, de acuerdo con estimaciones de la Comisión Nacional Contra las Adicciones y el Colegio de México, el tabaquismo le cuesta la vida a 66 mil mexicanos cada año, lo que dismunuye la expectativa de vida en el pais, afectando el promedio de vida para una mujer a 78 años y para un hombre de 73 años. Para hablar de la población en general, se consideran 76 años.
Lo anterior, significa que, el tabaquismo les cuesta la vida a la mitad de los fumadores a los 56 años. No a los 76 años. Eso deja 66 mil familias sin padre, madre, hermanos mayores, tíos, primos en edades productivas, cuando más necesarios son para salvaguardar el desarrollo sostenible de la familia, base de la sociedad.
En el marco del Día Mundial del Tabaquismo que se celebra cada 31 de mayo, Eduardo Hernández, Socio Director adscrito al área de Investigación y Desarrollo de la Clínica del Tabaco, expone que cuando una familia pierde a uno de sus miembros productivos, toda su estructura se cimbra. No solo hay que lidiar con el dolor del ser amado que ya no está, ahora hay que hacer frente a los compromisos económicos con menos recursos.
“Cuando mi padre murió a los 64 años de cáncer pulmonar por tabaquismo, no solo fue una vorágine de dolor y búsqueda desesperada de alternativas de salud y económicas para lidiar con su enfermedad, también se descuidaron los medios de sustento con los que él y mi madre habían sacado a la familia a flote”, refierió el maestro.
En entrevista, Hernández subrayó que una vez que se padece Cáncer de Pulmón (CP), se tienen un Infarto Agudo al Miocardio (IAM), un Accidente Cerebrovascular (ACV) o se desarrolla Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), la vida deja de ser como antes.
«Ahora la prioridad del individuo es recuperar su salud. Salud que no se hubiera comprometido en 9 de 10 casos de CP, 8 de 10 de EPOC, 5 de 10 IAM y 5 de 10 ACV si no se hubiera padecido tabaquismo en primer lugar».
La Organización Mundial de la Salud (OMS) señala que la industria del tabaco compromete el desarrollo de los países, incluidos la salud y el bienestar económico de sus ciudadanos, y propone medidas de lucha contra la crisis mundial causada por el tabaquismo que deberán adoptar las autoridades y la opinión pública para promover la salud y el desarrollo con base en el Convenio Marco para el Control del Tabaco al que México se suscribió desde 2004 y ratificó en 2008.
También refiere que los usuarios actuales pueden comprometerse a no consumir más tabaco o a buscar ayuda para conseguirlo; así, no solo mejorará su salud, sino también la de las personas expuestas al humo, especialmente los niños, así como sus familiares y amigos. El dinero ahorrado se podría utilizar para satisfacer necesidades básicas, como la compra de alimentos saludables, el cuidado de la salud y la educación.
En la prevención está la clave para que los menores no creen adicción a la nicotina, que no dañen la salud de quienes están a su alrededor y para que no experimenten con sustancias. La Clínica del Tabaco redobla esfuerzos en sus programas de prevención con base en evidencia en escuelas secundarias y preparatorias en todo el país, no solo del abuso del tabaco, sino de cannabis, alcohol, sustancias y conductas de riesgo.
Asimismo, el también autor del programa de ‘6 Pasos para Detener el Tabaquismo’, dijo que según estudios de la OMS, las tendencias mundiales reflejan un inquietante incremento del uso de drogas entre los sectores más jóvenes de la población y que se ha documentado ampliamente que la nicotina es puerta de entrada al uso de otras drogas, como marihuana, cocaína o abuso del alcohol.
Por eso, organizaciones este Día Mundial Sin Tabaco exhortan a las empresas al cumplimiento del marco regulatorio, la mitigación de riesgos asociados a sanciones por no conformidad, la salvaguarda de su personal y el incremento de su productividad.
El asertivo Información
