Esténtor Político
La fecha límite para la aprobación del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2021 es el 15 de noviembre; sin embargo, todo está listo para que sea una aprobación “fast track” antes de es fecha, puesto que ya todo está decidido con el dedito dictatorial del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) y que muy obedientemente obedecen los diputados de Morena en el Congreso de la Unión.
Lo que también está claro es que miles de mexicanos están en contra del recorte morenista al Presupuesto que está destinado a obras para colonias y pueblos y que por un tercer año consecutivo miles de municipios y millones de familias se van a quedar sin ellas; trayendo efectos inmediatos como la agudización, en el primer semestre de 2021, de la pandemia, aumento de la miseria entre la población mexicana.
De esta semana no pasará la aprobación del PEF en la Cámara de Diputados, una cifra que este año ascenderá a 6.3 billones de pesos, recursos que salen de los impuestos que todos los mexicanos pagamos como el IVA, el ISR, el impuesto a la gasolina y demás productos, además de la venta por energéticos y en los préstamos.
México lleva dos años de gobierno morenista y en ninguna de sus entidades se ven obras que beneficien a los ciudadanos; de hecho, durante todo el tiempo se ha visto más promoción gubernamental para las obras de relumbrón, aunque fallidas en su planeación, como la refinería de Dos Bocas o el sonadísimo Tren Maya; pero no hablemos del arreglo de carreteras o recursos destinados a infraestructura escolar porque no existen; o más aún, no hay atención al tema de la salud que tanto ha sido afectada por los contagios y muertes por el COVID-19.
Todo indica que los recortes que se harán al PEF 2021 van a desamparar más a los mexicanos a pesar de los esfuerzos, por ejemplo, de los gobernadores federalistas y otros grupos; la inconformidad ahí está presente, la denuncia ahí está y esto tarde o temprano le cobrará factura al mandatario nacional incluso, se comenta en los pasillos políticos, debería verse en el espejo de su homólogo Donald Trump, pues en el 2021, AMLO y Morena, quedarán en el olvido y en el bote de la basura por haber llevado a México al desastre económico, político y social; además, se habla de que el país estaría retrocediendo en el ranking de las economías del mundo y ya estaríamos en la décimo sexto lugar.
Los objetivos de Morena y AMLO con los recortes a los recursos del 2021 son claros y tienen, sin duda alguna, tintes y fines electoreros; tienen, también, la clara intención de dirigir cuantiosos recursos para sus obras emblemáticas; y por otro lado no van a contribuir seriamente al desarrollo económico de México porque no se observa que vaya a ver incentivos para su reactivación; además de que los mexicanos tendrán menos recursos en sus bolsillos porque varios millones de personas se van a seguir quedando sin empleo y por tanto sin dinero para llevar el sustento a sus familias.
En el PEF 2021 no habrá ajustes mayores y Morena y AMLO, como hace un año, volverán a cometer “La estafa y el gran atraco de noviembre”; mientras tanto, la pesadilla con olor a muerte de la pandemia por Covid-19 seguirá causando pérdidas de vidas humanas durante prácticamente todo el 2021 y, también, la Cuarta Transformación con Obrador a la cabeza no le será muy fácil afianzar y consolidar su plan político para las elecciones del próximo 6 de junio.
A partir de hoy en San Lázaro se monta un “circo político” o un “Reality Show” para aprobar algo que ya está planchado y las grandes partidas irán a parar a Pemex, CFE, el Tren Maya, el aeropuerto Felipe Ángeles y la Refinería de Dos Bocas y, como ya dijimos, al financiamiento destinado a las elecciones intermedias. La atención a la salud, la adquisición de vacuna contra el COVID-19 para los mexicanos, como los temas de salud, apoyos al campo, a la vivienda, electrificaciones, drenajes, aguas potables, etc., van a seguir siendo ignorados. Por si con los recortes no fuera suficiente atraco político, se sabe que el paquete de egresos que se autorice no está basado en la realidad económica del país y se estaría mintiendo a la nación.
Morena y AMLO tienen su prioridad en asegurar una gran cantidad de recursos para entregarlos a su antojo, sin reglas de operación precisas ni contrapesos de ningún tipo en las próximas elecciones. A partir de hoy, entonces, no habrá discusión del presupuesto, no habrá racionalidad del gobierno y mucho menos una visión profunda, científica y humanista que impulse un proyecto más justo y más próspero para México en la asignación del dinero que generamos todos los mexicanos con impuestos y trabajo diario. Las multimencionadas promesas de la 4T para disminuir la pobreza seguirán sepultadas entre las diatribas y persecuciones contra quienes protesten y denuncien la arbitrariedad e injusticia gubernamentales.
Casi al inicio del sexenio de Morena la Comisión Nacional de Derechos Humanos dio a conocer que hay 34 millones de mexicanos sin servicios básicos, el INEGI dijo que hay 44 millones que no tienen agua diariamente en sus casas, 5.5 millones de casas sin drenaje, en donde habitan más de 20 millones de personas y 2.5 millones de mexicanos carecen de energía eléctrica y los recursos para mejoramiento de vivienda y los destinados a productores agropecuarios pobres han sido disminuidos.
Este día, justo cuando arranca la sesión en la Cámara de Diputados, el Movimiento Antorchista Nacional, una organización política seria, de visión de futuro muy bien analizada y de verdadera raigambre popular hizo una convocatoria. Mediante un desplegado nacional llamó a todos los mexicanos a protestar “contra la concentración abusiva de poder en la distribución del presupuesto de la nación y contra su uso como instrumento electoral”; se convocó “a exigir obras, servicios, combate real a la pobreza y la pandemia, mediante movilizaciones, cadenas humanas en las calles y plazas, distribución de volantes y denuncias masivas en las redes sociales…”; ese fue el llamado de una Organización de al menos 3 millones de mexicanos en sus filas, que siempre ha analizado la situación del país y ha propuesto 4 ejes fundamentales para lograr un México más justo y más equitativo.
Bien haríamos todos los mexicanos en sumarnos y unir voces de exigencia, sino para lograr cambios en el acordado PEF 2021, sí para denunciar a Morena y a la Cuarta Transformación y evitar, a toda costa, que siga en el poder y eso sólo se puede lograr votando el próximo año por cualquier otro candidato, menos por los de Morena. Por el momento, querido lector, es todo.