Esténtor Político
Hace ya nueve meses, en octubre de 2020, el Senado de la República, por instrucciones muy directas del Presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), aprobó la eliminación de 109 fideicomisos, entre ellos estaba el Fondo de Desastres naturales (Fonden), que servía para que, en caso de emergencias por desastres naturales en el país como fuertes lluvias o huracanes, de inmediato se actuara para atender o auxiliar a la población.
El pasado martes 27 de julio a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) le tocó dar la estocada final, y publicó en el Diario Oficial de la Federación la eliminación del Fonden, con esto se da la puntilla para enterrar, en definitiva, a este programa que a decir de políticos y algunos representantes del mismo gobierno, pero sobre todo la población mexicana, sí era de gran ayuda cuando se presentaba alguna emergencia por algún desastre natural.
AMLO y su ‘Cuarta Transformación’ siguen desapareciendo y destruyendo todo lo que, creen ellos, no sirve; aunque más bien, van y arremeten con todo lo que no es afín a ellos y no se les cuadra, no logran controlarlo y menos dominarlo. Por ejemplo, López Obrador siempre dijo que el Fonden era una ‘caja chica’ y que los recursos de ese fideicomiso iban a parar a otros destinos, acusándolo, sin presentar ninguna prueba, de que había corrupción en ese fondo.
Y aunque ante el decreto publicado hace unos días, la Unidad de Política y Control Presupuestario, según, va a emitir y modificar la disposiciones específicas que establezcan los supuestos mecanismos presupuestarios que permitan ejercer los recursos para ejecutar programas y proyectos para atender los daños que ocasionen fenómenos naturales, lo cierto es que muy pronto la naturaleza dará un mentís al gobierno morenista, porque las lluvias arreciarán más y los damnificados nuevamente protestarán y exigirán ayuda al Gobierno Federal.
No se nos debe olvidar que entre los fondos que se eliminaron, en esos 109 fideicomisos, se quitó apoyo a periodistas amenazados, víctimas de la violencia, se retiró el apoyo a deportistas de alto rendimiento, a trabajadores del campo, a investigaciones científicas, trabajadores migrantes y sin duda a la atención a los desastres naturales.
La medida para aniquilar y matar en definitiva al Fonden se ejecuta en momentos en que los desastres naturales están a la vuelta de la esquina y siguen en aumento; por ejemplo, hay huracanes, tormentas, sequías, y posiblemente grandes afectaciones al campo, -porque, dicho sea de paso, la misma política morenista de no entregar fertilizantes a tiempo-, traerá malas cosechas y los campesinos se verán afectados y padecerán hambruna.
La supuesta ‘caja chica’ que según AMLO se usaba para desviar recursos desaparece, pero el Gobierno Federal no garantiza, con ningún otro programa, la atención de los ciudadanos en caso de desastres. La tarea ahora será de la Secretaría de Hacienda quien tendrá que ejercer recursos destinados a la atención de daños por siniestros naturales; muy pronto don Rogelio Ramírez tendrá forma de demostrar que su jefe de Palacio Nacional no se equivocó y que es capaz de operar de inmediato la ayuda requerida por los mexicanos.
Es más, forzando un poco, es necesario que la dependencia ya se ponga a trabajar con los aún damnificados de las inundaciones en Tabasco durante el 2020, porque hay miles de familias que se han quedado sin apoyos y no saben cómo están sobreviviendo, ni tampoco si sus casas no se derrumbarán mientras duermen porque fueron muy dañadas por las inundaciones.
La Comisión Nacional del Agua (Conagua) ya alertó de que unos 40 ciclones tropicales podrían formarse cerca de México durante esta temporada 2021, con la amenaza de que siete de ellos toquen muestro territorio; México, el gobierno federal, AMLO y sus dependencias… ¿están preparados para esto?; la respuesta, a todas luces, parece vaticinarse negativa.
Otro ejemplo, muy vigente, son las sequías que han afectado a miles de campesinos de estados del norte del país; el clima extremo que ha azotado los cultivos sin duda se ha vuelto una amenaza seria para el encarecimiento de los alimentos, incluso, ya elevados por la falta de empleos a casa de la pandemia.
La película de terror por la desaparición del Fonden la veremos muy pronto, pero el guion inicial dice que en la 4T todo se improvisa y no se sabe gobernar; no saben prevenir y no saben implementar políticas públicas favorables a la población. Por esa razón hay más de una crisis en México: crisis en la salud, crisis educativa, crisis en seguridad, crisis económica y una crisis alimentaria ya muy arraigada entre la población. Hoy AMLO, la 4T y Morena mataron al Fonden; mañana veremos una nueva crisis ante la falta de atención a los desastres naturales. Por el momento, querido lector, es todo.