El gobierno de Morena, autodenominado de la Cuarta Transformación (4T) y encabezado por Andrés Manuel López Obrador (AMLO), al recorrer casi una tercera parte de su administración, debe responder por 107 mil muertes: 50 mil fallecidos por la pandemia del COVID-19 y al menos 57 mil 677 homicidios; pero también debe responder a los mexicanos por el medio millón de contagiados .
Con cifras oficiales, el de hoy es un “jueves rojo” bañado de sangre al sumar, con los fallecidos de este día, al menos 50 mil muertos por la pandemia. Hoy es un día que los mexicanos de todos los rincones del país, desde Baja California hasta Yucatán, recordarán con profundo dolor y con lágrimas de impotencia y coraje. La soberbia, el autoritarismo e incapacidad del Gobierno Federal, que timonea AMLO, ha actuado incorrectamente para evitar los decesos.
México ocupa ya el tercer lugar mundial en muertes por la crisis sanitaria y con seguridad se colocará en el segundo lugar más adelante; otro dato de impacto y preocupante es el de 57 mil homicidios, cifra que es superior a la que tuvieron en su momento y en el mismo periodo tres administraciones anteriores: la de Peña Nieto 30 mil 321 homicidios, la de Felipe Calderón con 19 mil 571 y Vicente Fox con 24 mil 20.
AMLO y Morena gobiernan mal, los fallecidos sólo son una arista y es la más preocupante porque es la pérdida de vidas humanas; también la economía de México está por los suelos, hay un desempleo formal de 12.5 millones de mexicanos, más los del empleo informal; hay crisis alimentaria porque 70 millones de mexicanos no tienen posibilidad de acercarse la canasta básica alimentaria y se ha anunciado ya un paliativo muy improvisado para atender la educación de mas de 30 millones de estudiantes; todo eso, sumado, nos da un México ensangrentado y sumergido en la pobreza y miseria.
Al mismo tiempo vemos que el Gobierno Federal se descubre cada vez más como autoritario, que viola la ley y que usa todas las instituciones del poder político para atacar y amenazar a los mexicanos. Con un gobierno así México no podrá salir de su atraso económico en poco tiempo y seguirá orillándose por el desastre político y social.
Entonces, la tarea inmediata y urgente de todo la población es formar un frente común, un frente donde participe todo el pueblo y logre que en las elecciones del 2021 nadie vote por Morena y sí por los candidatos que tengan mejores opciones de gobierno para la población, de preferencia, que sean político que hayan salido de las entrañas mismas del pueblo, que él los identifique y ubique como buenos líderes y políticos que garanticen, al llegar al poder, verdaderos cambios para toda la nación.
El clímax no político… Además de que hay gobiernos morenistas que no saben gobernar, también hay militantes del mismo partido que reprimen y golpean a los mexicanos que denuncian, hacen peticiones o que desean apoyar a sus vecinos. Esto ocurrió en Tláhuac, donde la antorchista Laura Gil Munguía fue agredida físicamente cuando, con una pipa, repartía agua a pobladores de la colonia La Estación en la alcaldía. Los agresores son personas que se identifican como morenistas y a los que les incomoda que la gente cuente con el vital líquido, los morenistas, entonces, son partidarios del retroceso de la ciudadanía. Un acto inhumano, injusto y que atenta contra les leyes es lo que ocurrió ayer.
¿Qué dirá ante esto la jefa de Gobierno de la CDMX, Claudia Sheinbaum y el alcalde de Tláhuac, el morenista Raymundo Martínez Vite?, ¿van a castigar a los agresores o los dejarán que sigan cometiendo atrocidades? Los agresores contra Laura Gil actúan como porros para tratar de impedir a como de lugar que a la gente se les lleven apoyos para atenuar la difícil situación que padecen de pobreza y falta de servicios básicos como la del vital líquido, demandas que han sido enarboladas ante sus autoridades de gobierno pero que tampoco han sido resueltas.
El Antorchismo de la Ciudad de México, que encabeza Gloria Brito Nájera, interpondrá una demanda ante las autoridades correspondientes para que pongan fin a estos actos vandálicos que perjudican a los habitantes de Tláhuac, quienes aparte de que fueron olvidados por sus gobernantes, ahora reprimen a gente y organizaciones que llevan el progreso a las colonias pobres. Por el momento, querido lector, es todo.