Un nuevo estudio dirigido por un grupo internacional de investigadores reveló que algunos tipos de arañas pueden flotar por el aire.
De acuerdo con la revista Physics Review estos estudios demostraron que las arañas pueden elevarse del suelo debido a la influencia del campo eléctrico presente en la atmósfera.
A medida que la araña se desplaza hacia arriba, los hilos permanecen unidos al cuerpo del arácnido.
La araña en un momento dejará de flotar puesto que el peso de su cuerpo en combinación con el aumento de la resistencia del viento provoca que el arácnido empiece a bajar gradualmente hacia el suelo.
Las fuerzas ascendentes y descendentes determinan la velocidad ascendente final de una araña, que en promedio fue de 8.5 cm/s.
Los valores de las velocidades ascendentes coincidieron con estudios experimentales realizados anteriormente con arañas Erigone, que fueron encerradas en una cámara que tenía un campo eléctrico controlable.
Los científicos concluyen que si los múltiples hilos se encuentran cargados eléctricamente, podrán mantenerse de forma ordenada sin enredarse, lo cual sucedería en ausencia de cualquier campo o carga eléctrica.
Debido a la dificultad para realizar mediciones de la actividad electroestática de un hilo corto en condiciones controlables de laboratorio, los científicos desarrollaron un algoritmo informático que les permitió simular las fuerzas electroestáticas que actúan sobre la seda que producen las arañas.