Una investigación de Bloomberg, reveló que la plataforma de arrendamientos a corto plazo Airbnb ha ocultado delitos graves para no afectar la imagen de la compañia.
Según la autora del artículo, la empresa gasta unos 50 millones de dólares al año en compensaciones a clientes víctimas de delitos.
Frecuentemente, los desembolsos se realizan bajo la condición de no divulgación para no dañar la imagen de la compañía.
Así es como robos, violaciones y hallazgos de restos humanos son algunos de los delitos que los empleados del departamento de seguridad especial de la compañía impiden lleguen a oídos del público.
Tras su fundación en 2008, Airbnb se convirtió rápidamente en un actor clave del sector de los alojamientos turísticos.
Sin embargo, Chris Sacca, inversionista en Instagram, Twitter y Uber, se negó a invertir en Airbnb.
“Chicos, esto es muy peligroso. Si alguien es violado o asesinado, quedará en su conciencia”, dijo en algún momento.
Inicialmente, los fundadores de Airbnb se encargaban personalmente de responder a las quejas.
Pero pronto, tuvieron que contratar a personal específico por el aumento de reclamaciones.
Fue en 2011, cuando una propietaria de San Francisco relató en su blog que su casa había sido saqueada y vandalizada por unos inquilinos.
La casera denunciaba que Airbnb no le perstó ninguna ayuda y solo le pidió borrar los comentarios negativos que había publicado.
¿De qué tipo de casos se ocupa el servicio de seguridad?
El equipo del departamento de seguridad de Airbnb, compuesto por un centenar de empleados -muchos con experiencia militar o en servicios de emergencia-, se encarga de manejar casos tan graves como violaciones, asesinatos o robos.
Las tareas del grupo van desde brindar apoyo moral hasta cubrir gastos médicos, alojar en hoteles lujosos o incluso organizar viajes alrededor del mundo para compensar a los usuarios perjudicados.
A cambio, piden a los afectados que guarden silencio sobre lo sucedido en los apartamentos alquilados.
Exempleados del servicio de seguridad de Aribnb revelaron a Bloomberg que durante su estancia en la empresa tuvieron que atender a clientes que se habían escondido en armarios de los dueños de la vivienda, o casos como el hallazgo de restos humanos descuartizados.
Una vez, incluso atendieron la queja de un arrendador quien sorprendió a su inquilino en la cama junto con su hija de siete años.
Por su parte, Airbnb señaló que menos del 0.1% de sus viviendas de alquiler han generado problemas con seguridad.
Sin embargo, Bloomberg enfatizó que este porcentaje representa en realidad una cantidad alta de casos, ya que cada año se realizan más de 200 millones reservas a través de la plataforma.