La secretaria general iberoamericana, Rebeca Grynspan, alertó que las mujeres tienen 50% más de probabilidades de perder su empleo en la crisis derivada por el COVID-19 e insistió en que los efectos son mayores para ellas.
Grynspan aludió a la precariedad laboral y la sobrerrepresentación en el sector servicios como factores de riesgo para perder el trabajo.
Sostuvo que antes de la pandemia, las mujeres en América Latina ya participaban 25% menos en el mercado laboral que los hombres, ganaban 17% menos, tenían una mayor tasa de informalidad y 80% no estaba afiliada a la seguridad social.
Asimismo recordó que, ya antes, al regresar a casa −las mujeres− hacían el triple de horas en trabajos domésticos y de cuidado no remunerados que los varones.
Todo esto, planteó, hace que las mujeres tengan “50% más de probabilidades de perder su empleo que los hombres en esta crisis”.
“La pandemia discrimina, sus efectos son desiguales y diferenciados”, y que “arriesgan por revertir décadas de avances para las mujeres pero también sociales y económicos”, advirtió.
Grynspan, quien lleva décadas en cargos de cooperación y ayuda al desarrollo, enumeró varios datos que muestran el retroceso en la lucha por la igualdad entre hombres y mujeres en lo que va de pandemia.
Entre ellos mencionó el aumento de casos de violencia de género y puso como ejemplo que las llamadas al número telefónico de denuncia en España aumentaron 60% respecto a 2019 y que en México se reportó un incremento de “más del 30% de denuncias de casos de violencia familiar y un aumento de denuncias por violaciones”.
Por otro lado, se refirió a la exposición de las mujeres a la enfermedad, pues “estuvieron en primer línea de combate y también en los servicios esenciales”.
“A nivel mundial, las mujeres representan el 75% de todos los empleos en el sector salud”, apuntó antes de precisar que, a pesar de ello, ganan menos que los hombres y están “infrarrepresentadas” en los cargos de decisión tanto en los hospitales como en los ministerios.
Asimismo, la costarricense criticó que las mujeres también vayan a ver mermada su capacidad económica.
Al hablar de la crisis económica derivada de la pandemia, Grynspan manifestó que, “en general, de una crisis siempre se sale”, aunque se preguntó “con cuánto sufrimiento” y “cuánto desgaste” será en el caso del COVID-19.
“Y qué significa ese sufrimiento y ese desgaste para nuestra democracia y para nuestros prospectos de estabilidad y crecimiento futuros”, añadió.
En ese sentido, pidió no “perder la perspectiva” ni “retroceder ni desacelerar el paso” para alcanzar la igualdad de género.
“Pongamos en valor todo lo que las mujeres han demostrado en estos meses, al frente de la salud, de los cuidados, de las empresas, de las escuelas, de las familias, para hacer valioso lo que antes se ignoraba, para hacer visible lo que antes no se veía, para enderezar lo que antes estaba torcido”, invitó.
EFE