Especialistas de transporte y espacio público a nivel mundial coincidieron en que la mejor forma para mejorar la movilidad en México, tras lo más fuerte de la pandemia, es el uso de la bicicleta, el fomento de autotransporte urbano y ampliar el uso masivo del transporte público local.
Durante el XII Congreso Internacional de Transporte y Movilidad, realizado en México de manera virtual, la directora internacional de Transconsult, Angélica Castro, consideró que se deben contrarrestar aspectos negativos en la movilidad.
Por ejemplo, dijo, se debe limitar el uso de vehículos privados con bajas ocupaciones, ya que eso aumentó el número de autos en vialidad, ya no sólo en distancias largas, también en cortas. En consecuencia a lo anterior hubo un incremento en los niveles de contaminación, a pesar de la pandemia de Coronavirus.
Puntualizó que pese a que las motocicletas han sido alternativa para la movilidad en las grandes ciudades, por la rapidez y los bajos costos de adquisición, no es la mejor opción debido a que continúa la ampliación de la ocupación individual en vehículos, lo que genera congestionamientos y emisiones contaminantes.
En la Mesa de diálogo ‘Rediseño de la movilidad para un nuevo futuro’, aseguró que uno de los graves problemas para una movilidad adecuada es el distanciamiento en los sistemas de transporte público.
Reducir los viajes de trabajo
Al respecto, Ángel Molinero, director general de Urbanismo y sistemas de Transporte Ustran, señaló que debe existir un transporte público adecuado eficiente y accesible a la economía de todas las personas, en el que no haya distinciones de su uso, para que se pueda recuperar después de quedar severamente afectado por la pandemia.
En su participación aseguró que después de la pandemia se tiene que dar una respuesta importante para reducir los viajes de trabajo y a la escuela, pero sin llegar a la no movilidad.
Aseguró que la pandemia generó el teletrabajo, la tele escuela y casi puso fin al intercambio de personas a persona, por lo que ahora se deben plantear estrategias para la movilidad activan y enfatizar las restricciones al uso del automóvil.
Añadió que para la recuperación del transporte público, se deben invertir por parte de los gobiernos para ampliar el servicio y la mejora, y tener un esquema claro y confiable de financiamiento.
“El futuro lo tenemos encima y tenemos que reforzar el transporte público, para generar una movilidad activa que nos permita llegar a una ciudad compacta, que podemos llamar la ciudad de los 15 minutos”, expuso Molinero.
Julián Sastre González, presidente del Instituto de Movilidad, señaló que ahora, tras lo más fuerte de la pandemia, las ciudades importantes deben apostar por el transporte colectivo y la electromovilidad.
Se debe repensar en un sistema de bicicleta pública de quinta generación, ya que además de ser unidireccional, e intermodal, incluye otros elementos de micromovilidad como patinetes y tecnología de última generación.
“La movilidad activa debe estar en la cúspide, porque son además sostenibles y saludables, y es inteligente por su aplicación que lo convierte en un sistema revolucionario, porque los proyectos de movilidad deben servir para crear ciudad”, expuso Sastre González.