El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, defendió que mejorar la atención médica es más importante que tener cifras actualizadas de fallecidos.
Luego de las controversias que han generado las cifras de muertes en México, López-Gatell explicó que están trabajando para tener una “estadística de mortalidad no observada”, porque los pacientes que murieron sin tener el resultado de la prueba de Covid-19 tardan unos siete días en ser contabilizados.
Agregó que ademas, hay un número desconocido de muertos sospechosos a los que no se les pudo hacer la prueba y no quedaron en los registros.
“Sería un acto de irresponsabilidad dedicar la fuerza de trabajo en este momento a este tipo de ejercicios cuando tenemos que atender otros elementos”, justificó.
A mediados de junio se alcanzará el pico máximo de contagios
En entrevista para la agencia EFE comentó que México alcanzará el punto máximo de contagios la próxima semana. Sin embargo, en algunas zonas la pandemia se mantendrá hasta octubre.
“Empezamos en febrero [el brote de Covid-19], terminaremos en octubre y podríamos decir que a mitad de junio estaremos a la mitad del conjunto de curvas epidémicas”, dijo a EFE.
En abril, el funcionario anunció que el pico de la epidemia llegaría en la primera semana de mayo. Sin embargo, López-Gatell matizó que esa fecha obedecía únicamente a la zona metropolitana de la Ciudad de México, la zona más afectada.
Pese al escenario que vive el país respecto a la epidemia, López-Gatell defendió que la situación no se les ha ido de las manos.
“No hemos tenido que tomar decisiones que bordan el límite de la ética como decidir que una persona se queda sin ventilador porque le toca a otra. Puedo decir con mucha tranquilidad que evitamos muertes.“
Y dudó de algunas investigaciones periodísticas que han estimado que en la capital la mortalidad es tres veces superior a la observada.
Ante la posibilidad de un nuevo brote sumado con la influenza a finales de año, dijo que el país está “preparado” gracias a la “reconversión hospitalaria” que se ha hecho durante esta crisis, en la que se han incrementado las camas de terapia intensiva de unas 3 mil 500 a 13 mil.
“Nos sentimos muy satisfechos porque no hemos tenido ningún caso de que por sobreocupación hospitalaria tengamos que tener a alguien fuera del hospital”, expresó López-Gatell.
Añadió que el país cuenta con suficientes ventiladores.