Debanhi Escobar tenía 18 años, vivía en Nuevo León y estudiaba Derecho; hoy está muerta.
El 8 de abril fue a una fiesta con unas amigas. Nunca más volvió a su casa. Trece días después, encontraron su cuerpo tirado en una cisterna de cuatro metros de profundidad.
El caso de Debanhi es uno más de mujeres perdidas y halladas muertas que conmocionan a México, un país en el que hasta este jueves están reportadas 99 mil 249 personas desaparecidas, de las cuales casi 25 mil son mujeres.
La identificación de la adolescente la hizo su padre, Mario Escobar.
“No llegamos al resultado que el corazón de mi esposa y el mío pedían, querían y exigían. Mi hija está muerta… y no sé qué hacer. Por creer en la Fiscalía, pido perdón a mi familia; fueron muchos días y la Fiscalía no hizo su trabajo correctamente”, dijo entre lágrimas.
Acababa de reconocer el cuerpo. Pero aun en medio de su dolor, habló con la prensa que se aglomeró debido a que ésta es una de las desapariciones y muertes más mediáticas de los últimos tiempos. Son tantas, que pocas trascienden con nombre propio.
“Estoy molesto porque me equivoqué, creí en la Fiscalía, nunca me pasaron los tomos, les pedí copias, es mi derecho como víctima, pero nunca los tuve en mi poder porque ellos no hicieron su trabajo. Exijo justicia, que se aclare por qué desapareció Debanhi, en qué momento supieron y no nos informaron“, reclamó.
Cronología del caso
El 8 de abril, la joven Debanhi Susana Escobar Bazaldua acudió a una fiesta en el municipio de Escobedo con dos amigas, quienes regresaron a sus casas y dejaron a la joven sola en el lugar.
Dichas amigas llamaron a un ‘contacto de confianza’ para que la recogiera. Se sabe que el contacto trabaja en plataformas de viaje tipo Uber/Didi, pero el traslado de Debanhi se realizó fuera de la plataforma. Cerca de las 5:00 horas del 9 de abril, el ‘contacto de confianza’ habría dejado a la joven sola en una carretera del municipio de Escobedo y le tomó una fotografía, que es la última imagen que se tiene de ella.
El 10 de abril, las autoridades difundieron el boletín de búsqueda para la joven, quien tiene como señas particulares cicatrices antiguas debajo de la barbilla y otra en su mano derecha.
Mario Escobar, padre de Debanhi Susana, acudió a la Fiscalía donde se le informó sobre los trabajos para la localización de su hija. Dijo tener mucha confianza en Dios y en las autoridades.
Días después el padre mencionó que buscan aclarar las versiones que se tienen alrededor del caso. Y es que, es incoherente que el taxista haya dejado a Debanhi sola en la carretera; y que no cuadra también el actuar de sus amistades.
El 19 de abril, la Fiscalía General de Justicia de Nuevo León realizó una diligencia de cateo para buscar objetos personales de la joven en el condominio lateral número 18 planta baja de la Unidad Habitacional Condominios Constitución, en el centro de Monterrey. El resultado fue negativo.
Exigen justicia
También se realizó una inspección en el interior de la empresa Alcosa Transportes Internacionales, con autorización de los propietarios y encargados del negocio, misma que no arrojó datos relevantes. Lo anterior debido a versiones divulgadas en el sentido de que la joven ingresó a dicha empresa y no volvió a salir.
La noche del 21 e abril, personal de la Fiscalía de Nuevo León llevó a cabo un operativo en el que localizaron un cuerpo en una zona aledaña al Hotel Nueva Castilla. Ahí fue hallado el cuerpo de la menor; este lugar ya había sido registrado, por lo que las dudas surgen en este caso.
El gobernador de Nuevo León, Samuel García reconoció la falta de transparencia en este caso, por lo que tras enviar un abrazó a los padres de la joven, exhortó a la Fiscalía para que dé a conocer puntualmente lo ocurrido en la investigación.
“Yo como gobernador del estado no conozco la carpeta, no he visto un vídeo y así deben estar muchos entonces yo pido con mucho respeto a la Fiscalía que se haga una fiscalía abierta de puertas y paredes de cristal. Que nos den a conocer todo lo que salga en la autopsia la evidencia”, dijo