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El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, indicó que será hasta dentro de dos años cuando el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) dé una adecuada estadística de mortalidad a causa del COVID-19.
Durante la conferencia diaria sobre COVID-19 precisó que la estadística de mortalidad es una responsabilidad, en términos administrativos y legales, que le corresponde dilucidar al Inegi, institución que elabora, a partir de criterios de clasificación y tiempo específicos, los datos de la mortalidad.
“La estadística de defunciones la elabora finalmente Inegi con información que obtiene del sector salud, pero con métodos diversos para un análisis cuidadoso. ¿Cuándo va a estar lista la estadística final de defunciones de COVID-19? Seguramente un par de años después de este primer año de la epidemia”, refirió.
Agregó que durante una contingencia sanitaria como la que vive México, la vigilancia epidemiológica debe hacerse preguntas técnicas necesarias para orientar sobre la prevención, control, recuperación, respuesta y rehabilitación.
“Cada tipo de enfermedad tiene sus particularidades de presentación, no solamente clínica, biológica o social y cuando hablamos de los social hablamos de la población”, precisó.
López Gatell señaló que la influenza-neumonía es la octava causa de mortalidad en el país, por ello es importante hacer una vigilancia durante su temporada, pues en la mayoría de los casos de neumonía no se conoce el agente infeccioso que la provocó.
Además, dijo que no se conoce debido a que los protocolos consideran más conveniente iniciar tratamiento a partir de las características clínicas o de riesgos sin esperar al diagnóstico específico.
Puntualizó que de las personas con neumonía, cerca de una tercera parte podrían ser atribuidos al virus de influenza y en un porcentaje del 3% al 5% podrían ser graves con alto porcentaje de mortalidad. Según datos de 2018, se suscitaron 30 mil muertes a causa de neumonía-influenza.
Refirió que las personas más vulnerables a COVID-19 son mayores de 60 años, personas con padecimientos crónicos, diabetes, hipertensión, las mismas que son vulnerables a padecer influenza; además de las mujeres embarazadas que corren mayor riesgo para complicaciones de influenza, por ello es importante las campañas de vacunación a esta población.
Con información de El Universal
