Una encuesta global afirma que se vive una “infodemia masiva” en varios países del mundo a consecuencia del COVID-19.
En el marco de la campaña #FreedomFightsFake, impulsada por la Fundación Friedrich Naumann para la Libertad, la compañía líder mundial de datos, insights y consultoría, Kantar, entrevistó alrededor de siete mil 300 personas de todos los grupos de edad sobre su uso de los medios de comunicación y los informes falsos durante la epidemia de Coronavirus. Estas entrevistas se realizaron en: México, Estados Unidos, Alemania, India, Jordania, Sudáfrica y Filipinas.
Si bien la gran mayoría de los encuestados afirma que están “muy bien” y “bastante bien” informados sobre la actual pandemia, esta evaluación subjetiva entra en conflicto con otros resultados arrojados por el estudio.
Por un lado, al 47% de los entrevistados en México les resulta difícil distinguir entre noticias e informes falsos deliberados. Por el otro, el 90% está preocupado por el aumento de informes falsos del mismo tipo. Mientras que en Alemania, sólo el 51% está preocupado por el aumento de la desinformación, siendo los alemanes los “menos preocupados” entre los entrevistados.
El 56% de los encuestados en nuestro país está de acuerdo con la afirmación de que los medios de comunicación ocultan hechos sobre el Coronavirus, debido a la presión de los gobiernos. Estados Unidos, y Sudáfrica poseen cifras similares: más de la mitad de los sujetos del estudio apoyan esta declaración.
La principal fuente de información es la televisión (75%), seguida de las redes sociales (72%), periódicos o revistas en internet (49%) y otras fuentes en internet (45%). La radio (29%) y los medios impresos (18%) se utilizan en un grado significativamente menor. Las personas más jóvenes en todo el mundo obtienen su información principalmente en internet.
Disminución de la confianza
Una consecuencia de influir deliberadamente en las noticias en los tiempos de COVID-19 es que la credibilidad de los políticos y los médicos disminuye. El estudio muestra una clara tendencia internacional: tres cuartos de todos los encuestados señalan que los informes falsos y deliberados sobre el Coronavirus socavan la competencia de estos grupos profesionales. En México, el 79% de los encuestados está de acuerdo con esta declaración.
El sentimiento subjetivo de estar bien informado sobre la epidemia se cuestiona una vez más cuando se pregunta sobre presuntos hechos relacionados con el COVID-19. Las respuestas sobre su origen son preocupantes no sólo por sus consecuencias para la salud, sino también por las teorías que lo rodean.
Casi la mitad de todos los encuestados dicen que el COVIS-19 fue creado en un laboratorio chino. En México, el 37% de las personas están convencidas de esta teoría. En tanto, el 25% de los entrevistados cree que el virus es una arma biológica china (comparada con 72% en India y 52% en Filipinas, 32% en EUA y 13% en Alemania).
“El estudio demuestra que las personas tienen una percepción de estar bien informadas, aunque la encuesta revela una crisis sustancial en la confianza hacia los medios. La democracia no puede permitirse una crisis de credibilidad de los medios de comunicación”, dijo el profesor Karl-Heinz Paqué, presidente de la Junta de la Fundación Friedrich Naumann para la Libertad.