Te imaginas ir nadando en un lago y de pronto encontrarte con un minotauro y alcanzas a ver en el fondo del lago un minotauro bajo el agua, inmóvil.
Esto le pasó a un hombre llamado Cristian, quien estaba practicando canotaje en el lago Mari Menuco, en Argentina.
Este joven encontró una estatua en forma de minotauro, de metro y medio de alto, con un peso aproximado de 250 kilogramos. Estatua que nadie había visto antes.
El buzo llamado Cristian pasaba con su canoa, cuando de pronto notó algo en el fondo, lo que parecía una persona.
Rápidamente hecho otro vistazo y se dio cuenta que esa persona tenía cuernos.
“Primero me agarró miedo. Hay muchos mitos sobre el agua y todos nos reímos, pero creo que algo cierto de hay sobre eso”, dijo.
En encuentran a los responsables de este susto
Tras la historia de este buzo un medio se dio a la tarea de investigar quien había colocado esa estatua ahí, hasta que encontró a los artistas responsables de esta increíble escultura, quienes prefirieron mantener el anonimato.
Resulta que todo el proceso para sumergir las esculturas se logró el 19 de febrero de este año y desde entonces nadie habló de ello para mantener el misterio.
Querían que la obra fuera algún ser sobrenatural que protegiera el fondo del agua, además que, tal vez, se convirtiera en una motivación para quienes bucearan en la zona. Así llegaron a un minotauro.
Pensaron que podrían ser una exposición del cambio climático: ahora están a 4 metros bajo el agua, pero con la sequía es probable que un día la escultura ya no esté bajo el agua.
El minotauro bajo el agua no fue la única escultura, también sumergieron una máscara.