Fabiola Campomanes hizo fuertes revelaciones en su más reciente publicación de Instagram, donde confesó que tras someterse a varios tratamientos estéticos para eliminar unas manchas de su piel, ésta se había quemado, provocándole severas lesiones en la frente.
“Les hago este videito de cara lavada, no para que me juzguen sino para darles un consejito (…) hace ocho años me salieron unas manchas en la cara, justamente por abusar del sol -nunca hay que abusar de nada- y hace ocho años que me la he pasado obsesionada con ellas y con quererlas desaparecer de mi piel. A pesar de que tengo muy buena piel y que debería de estar agradecida por la piel que tengo, pues me obsesioné por quitármelas”, comenzó.
La actriz destacó que visitó a los mejores médicos para tratar de eliminar las manchas y aunque algunos la ayudaron, el último tratamiento que probó lastimó severamente su piel.
“Mi piel está muy tratada, yo creo que ya no aguantó y se empezó a abrir (…) confío en que obviamente van a sanar, van a cicatrizar, van a estar bien”, comentó con los sentimientos a flor de piel.
La protagonista de ‘El juego de las llaves’ destacó que las heridas en su rostro las tomó como una advertencia de su cuerpo, por lo que hizo un llamado a no obsesionarse con la perfección.
“Lo más importante es el llamado de atención de mi propio cuerpo, de entender que no es bueno obsesionarse con nada. Es una tontería real, hay que aceptar los cambios, porque todo cambia; eso es una constante en nuestras vidas, si no lo entendemos vamos a sufrir mucho», añadió casi al borde del llanto.
Fabiola Campomanes también reflexionó sobre la importancia de mirar hacia el interior de las personas, que es lo que más importa.
“A veces está divertidísimo utilizar los filtros y ver esas pieles perfectas, pero la perfección no existe, no es real. La realidad de las cosas es que vamos a cambiar todos, nuestro físico se modificará y hay que fluir con eso. Confiemos en lo que es real, la energía que somos, en lo que hacemos sentir a las personas. Eso es increíble, eso es más lindo, porque no se ve, se siente”, dijo.
Y sin poder contener las lágrimas, Fabiola Campomanes, agregó: No nos obsesionemos, nadie es perfecto. Lo que sí, es que podemos ser más lindos cada día, de acá adentro. Esa oportunidad la tenemos a diario. Quizás el tiempo nos cambie físicamente, pero también el tiempo nos puede cambiar cada vez para mejor, interiormente, entonces confiemos en eso”.