Fuentes del Gobierno Federal informaron que la Fiscalía General de la República (FGR) solicitó a la Interpol una ficha roja para buscar y localizar a la Laura Bozzo, quien cuenta con una orden de aprehensión por el delito de evasión fiscal.
Lo anterior luego de que el pasado miércoles 11 de agosto un juez federal vinculó a proceso a la conductora de origen peruano por la venta indebida de un inmueble que estaba embargado por el Servicio de Administración Tributaria (SAT), para garantizar el pago de un adeudo por 13 millones de pesos.
A petición de la FGR, el juez determinó prisión preventiva justificada contra Bozzo; y le dio un plazo de 48 horas para presentarse de manera voluntaria en el Centro de Prevención y Readaptación Social Santiaguito, en Almoloya, Estado de México.
Dicho plazo se venció el pasado viernes y la conductora de televisión no se presentó al penal, por lo que el juez federal giró una orden de aprehensión contra Laura Bozzo: además la FGR inició los trámites para la emisión de la ficha roja para que la presentadora sea buscada en más de 190 países para ser presentada ante la justicia mexicana.
Alfredo Adame la acusó
El actor Alfredo Adame confesó que él fue quien llamó al SAT para denunciar a Laura Bozzo por haber vendido una casa que estaba embargada.
“Me comunico con el Sistema de Administración Tributaria y les digo: ‘Laura Bozzo, la conductora de televisión, cometió un delito. Vendió un condominio que ustedes lo tienen embargado. Yo les di el aviso”, aseguró en el programa ¡Suéltalo Aquí! de Multimedia 7.
Adame dijo que se enteró porque un día le mandaron un mensaje a sus redes sociales dándole un teléfono y diciéndole que tenía información sobre Bozzo.
Al contactar a la persona, ésta le relató que la conductora le vendió a su esposo un departamento; sin embargo, cuando quiso escriturarlo resultó que estaba embargado por el SAT.
La venta fue por 12 millones de pesos. Bozzo comenzó a poner pretextos cuando los compradores quisieron escriturarlo, por lo que contrataron a un abogado y descubrieron el fraude.
“Y yo, hace ¿qué te diré? unos seis meses, siete meses, sin ningún tapujo ni nada, me comunico con el SAT”, dijo Adame.