Los Tigres lo intentaron, pero no les alcanzó para superar al campeón de la Champions League, Bayern Munich, y perdieron 1-0, con un polémico gol, la final del Mundial de Clubes, celebrado en Qatar.
El cuadro regiomontano se defendió bien, pero el francés del Bayern, Benjamin Pavard, aprovechó una mala salida por aire de Nahuel Guzmán y anotó el único gol del encuentro.
En primera instancia este gol fue anulado por fuera de lugar, pero el VAR revirtió esta decisión. Esta anotación también estuvo en la polémica, pues el balón le pegó en la mano del jugador Robert lewandowski
Ricardo Ferretti, entrenador de los Tigres, mostró un gran orden. La táctica regiomontana provocó 19 tiros de los bávaros, nueve de ellos a la dirección del guardameta, mientras que André-Pierre Gignac y Carlos González, en el ataque universitario, no tuvieron suficientes oportunidades para inquietar a Manuel Neuer.
El Bayern Munich, con este triunfo, conquistó el “sextete”, un logro que sólo había conseguido el Barcelona en 2009. El cuadro alemán se coronó en la Bundesliga, Copa de Alemania, Supercopa, Champions League, Supercopa de la UEFA y ahora en el Mundial de Clubes.
Representamos bien a México
André-Pierre Gignac, figura de los Tigres, aseguró que representaron muy bien a México: “con garra y corazón”.
“Estamos un poco decepcionados por el resultado. Sabíamos que íbamos a enfrentar a un gran equipo, no fue nada fácil y creo que representamos muy bien a México. Para una primera presentación, un segundo lugar fue un gran resultado. Vamos a regresar más fuertes y espero que varios mexicanos puedan llegar a la final”, comentó el francés quien se llevó el trofeo como máximo anotador con tres dianas.
Es la segunda vez que Tigres juega una final a nivel internacional. En 2015 llegó a la final de la Copa Libertadores y también perdió.