Morena y sus aliados lograron lo que buscaban: posponer hasta enero el dictamen de la posible ratificación de la fiscal General de Justicia de la CDMX, Ernestina Godoy.
Debido a que no cuentan con los votos suficientes para ratificarla, durante la sesión de este miércoles 13 de diciembre, cuando se tenia previsto votar este tema, los legisladores de Morena y otras bancadas afines, alargaron y alargaron la sesión hasta después de las 17:00 horas y así reventarla.
Y es que, después de 17:00 horas, de acuerdo al Reglamento Interno del Congreso, la Mesa Directiva debe preguntar al pleno si la sesión continúa hasta finalizar el orden del día o si se suspende, a lo que Morena y aliados votaron por levantarla.
La sesión se suspendió mientras se desahogaba la intervención de 30 diputados que habían pedido razonar su voto en este tema.
La estrategia de Morena para alargar este debate fue que 21 oradores se anotaran para razonar su voto, y aunque el tiempo de intervención era de sólo de cinco minutos, algunos hicieron uso de la voz hasta por 22 minutos, lo que alargó y alargó el debate. Además, tal vez a propósito, los diputados morenistas se aludían entre sí para darse oportunidad de hablar entre cada posicionamiento, y también se preguntaban entre cada y cada intervención.
Esta sesión fue para recordar, pues por primera vez inició con 64 diputados y minutos después se incorporaron los dos faltantes, por lo que hubo casa llena. El diputado de Morena, Fernando Mercado, agradeció a la fiscal Ernestina Godoy por este “regalo de Navidad”.
Diputados de oposición, e incluso de Morena, hicieron una ‘pijamada’ y se quedaron a dormir desde una noche antes en el recinto, y en hoteles cercanos, para no tener problemas para ingresar este miércoles, otros llegaron por la madrugada.
La mayoría de los diputados morenistas tacharon esto como un exceso y un circo, pues no hubo problemas de acceso. Poco a poco las y los legisladores del partido guinda comenzaron a llegar al recinto, pero su cara lo decía todo: sabían que iban a perder la votación y que no tenían los votos para ratificar a Godoy Ramos.
Mientras todo esto ocurría dentro del recinto, afuera grupos a favor de la ratificación de Godoy Ramos llegaron a mostrarle su apoyo.
Al fundamentar el dictamen en sentido positivo para esta ratificación, el presidente de la Comisión de Administración y Procuración de Justicia, Octavio Rivero, llamó a los diputados para que votaran con una profunda vocación y congruencia política, en apego a los argumentos y razonamientos expuestos durante todo este proceso.
“Es necesario no permitir que las presiones, amenazas y ofrecimientos conduzcan su actuar como representantes de la soberanía popular, que sea el sentido de justicia ciudadana y de empatía social, lo que dicte el sentido de su voto”, aseveró.
Por algunos momentos este debate se tornó álgido, por ejemplo, cuando la diputada Luisa Gutiérrez llamó a Carlos Hernández “diputado Cabañas”, en alusión a las presuntas casas que construyó en suelo de conservación. Otro momento tenso fue cuando Nazario Norberto subió a tribuna y tachó precisamente a Luisa Gutiérrez de mentirosa por haberlo acusado de acoso sexual. “La violencia de género también es en contra de los hombres”.
Elizabeth Mateos criticó a los panistas por su presunta corrupción inmobiliaria y aventó billetes de juguete: “El dinero es lo único que les interesa”.
La diputada del PRI, Maxta González, fue la primera en advertir esta estrategia dilatoria y pidió en dos ocasiones que se acortaran los tiempos de cada intervención, pero Morena no hizo caso.
Así pasaron las horas y las horas hasta que después de las 17:00 horas el diputado Gonzalo Espina pidió que se votara para ver si la sesión seguía o se posponía, lo que al final pasó.
Más tarde, los diputados acordaron que este tema continuará hasta enero en un periodo extraordinario de sesiones.
Con información de El Universal