El gobierno de la CDMX informó que la palma, que se encuentra en la glorieta con el mismo nombre sobre Paseo de la Reforma, la cual tiene más de 100 años, será retirada debido a que se encuentra enferma por diversos hongos y bacterias.
La jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum, indicó que la recomendación de los expertos es retirarla debido al gran daño que ya tiene, por lo que por el próximo domingo 24 de abril será retirada y trasladada al Vivero Nezahualcóyotl.
De igual forma, precisó que en su lugar se pondrá a consulta ciudadana si se planta una jacaranda; ceiba; fresno; ahuehuete; grevilia o alguna otra especie. También se pondrá a consulta cuál sería el nuevo nombre de esta glorieta que es conocida como la Glorieta de La Palma.
“Lamentablemente, la palma de la Glorieta de La Palma tiene un hongo. Desde que llegamos al gobierno de la ciudad se analizó el tema, tanto del arbolado enfermo por distintas plagas; fue contactar con los expertos para saber qué estaba pasando exactamente con las palmeras y se hizo un estudio, y particularmente, en la Glorieta de La Palma se estuvo trabajando para ver si la palma o la palmera podía salvarse, lamentablemente no puede salvarse”, detalló.
El coordinador del doctorado en Ciencias Agrícolas Tropicales del Colegio de Postgraduados (COLPOS), Carlos Fredy Ortiz, explicó que es necesario su retiro por el daño que tiene por diversos patógenos y para así asegurar el bienestar de la ciudadanía, pues podría derrumbarse debido a que algunas zonas ya están secas.
“Todas las palmas del mundo tienen diversas enfermedades de diversos orígenes y podemos ver que las enfermedades son causadas por microorganismos y otras veces trasmitidos por insectos o enfermedades producidas por hongos que tienen la capacidad de favorecer el colapso”, explicó.
¿Cómo llegó la palma a Paseo de la Reforma?
El trazo original del Paseo de la Reforma corría de la entrada del bosque de Chapultepec a Bucareli, y fue construido por orden de Maximiliano a mediados del siglo XIX, bautizándolo como ‘Paseo de la Emperatriz’, en honor a su esposa Carlota.
Después, en tiempos de Porfirio Díaz se plantaron árboles a lo largo de la avenida; se embellecieron las banquetas y camellones; se colocó alumbrado y se construyeron varias glorietas en las cuales habría diferentes monumentos.
En lo que hoy es el cruce de Reforma y Niza se construyó una glorieta que, según cuentan algunas versiones, estaría dedicada a un monumento en honor a Miguel Hidalgo que, junto con el Monumento a la Independencia, conmemoraría el primer centenario de la Independencia en 1910.
Pero en lo que estaba todo listo, plantaron ahí una palmera para que la glorieta no luciera tan sola.
Otra versiones dicen que desde un inicio se pensó en solamente poner una palmera ahí. Nunca se construyó ese monumento a Miguel Hidalgo y con la Revolución todos los planes cambiaron.
La ciudad empezó a crecer rápidamente, especialmente a mediados del siglo XX, y el Paseo de la Reforma tuvo varios cambios, pero la palma nunca se movió. Parece que durante más de 100 años nadie se acordó de que la Glorieta de La Palma era un lugar reservado para un monumento, por lo que ese gran árbol se convirtió en parte del paisaje, pero desgraciadamente murió.