El conductor del convoy del Metro que se desplomó en la Línea 12 dio una entrevista para el noticiero de Ciro Gómez Leyva y contó cómo vivió el momento del fatídico hecho que cobró la vida de 25 personas.
Rodrigo García Flores relató que eran aproximadamente las 22:20 horas cuando se encontraba realizando el último recorrido de su turno en el convoy con número económico 19.
Cuando se dirigía de la estación Tezonco a Olivos “antes de llegar a la estación Olivos, siento que el tren se levanta”. Al sentir este movimiento, que auguraba la tragedia, notó que los cables de la catenaria se movían y los monitores del tren indicaban corriente cortada.
Al bloquear la marcha del tren y llegar deslizándose aparatosamente por las vías de la estación, Rodrigo salió de la cabina y vio humo hasta el fondo de la estación, momento en que fue a la parte de adelante del andén para comunicarse al puesto de control, informar del percance, solicitar el corte de corriente y recibir indicaciones.
Al ver que la gente comenzaba a salir del tren comenzó a tranquilizarla, como le instruyeron desde el centro de comando cuando reportó el accidente: “hubo corte de corriente, vamos a desalojarlos, tranquilos, por favor” iba diciendo a los pasajeros a bordo del convoy.
Observó que el jefe de estación ya desalojaba gente por la parte de atrás del tren. El jefe de estación notificó a Rodrigo que había ocurrido un descarrilamiento.
Después comenzaron a desbloquear las puertas de los vagones y abrirlas manualmente; al llegar al último vagón le impactó ver que faltaban vagones “¿y lo demás dónde quedó? Fue algo muy impresionante que la verdad no le deseo a nadie. Es algo muy fuerte, muy duro”, contó el conductor.
Después del impacto
Tras la impresión del incidente y el caos que comenzaba a desatarse, el conductor contó que se trasladó al último vagón que quedaba en el tren y vio a tres personas inconscientes e incluso un miembro cercenado.
“En una parte había un brazo y me decía un poli ‘¿qué hacemos con el brazo? No mueva nada, deje que entre el personal a sacar a las personas’”, dijo García Flores.
Tras esas impactantes escenas, Rodrigo García comenzó a desalojar a la gente priorizando que se quedaran en el lugar los familiares de los heridos “Vi a un joven que estaba ahí y le dije ¿tú eres familiar?, y me respondió sí, es mi esposa; le digo quédate con ella, no te muevas de ahí”.
También contó que la policía auxiliar se movilizó para ayudar a la gente atrapada entre los fierros retorcidos y los escombros de la ballena desplomada, y comenzaron a preguntar si había alguien ahí.
“Entonces comenzaron a golpear por dentro y empezamos a ver por dónde sacar a la gente, pero estaba todo inclinado y todo deshecho por abajo. No había por donde entrar y corríamos el riesgo de hasta colapsar más toda esa estructura y caer, por lo que tuvieron que esperar el arribo de personal de protección civil”, indicó.
Así fue el testimonio del conductor Rodrigo García Flores, quien fue llevado el mismo día del accidente a un hospital para ser atendido por un contusión en la espalda, de la que se recupera en su casa.
‘No soy culpable’
Lamentó la pérdida de vidas tras el fatal siniestro, y dijo que no se considera responsable de lo sucedido. Además señaló que hay más personas involucradas en los hechos y con responsabilidad por lo sucedido el pasado 3 de mayo.
“Creo que no soy responsable de lo que pasó y que en realidad hay momentos en que uno no sabe que es lo que pueda suceder”, comentó visiblemente afligido, y agregó que no se puede asumir como el único responsable de lo sucedido, y espera la comprensión de la gente, pues también lamenta la pérdida de vidas.
“Espero que la gente entienda que no todo queda en manos del conductor; hay terceras personas que entran en toda esta situación. Que vean que no nada más somos nosotros (los responsables), sino que hay más (personas)”, apuntó.