La noche de este 10 de julio, una niña de 6 años murió aplastada en un elevador del hospital número 18 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Playa del Carmen, Quintana Roo.
Los reportes preliminares apuntan a que el elevador empezó a subir con las puertas abiertas cuando la camilla en la que era transportada la niña, que estaba enferma de dengue, todavía no entraba en su totalidad.
“Alrededor de las 22.30 horas, al ser trasladada, el elevador presentó una falla y la menor sufrió una presión que por lo mismo terminó ocasionando su sensible pérdida”, ha señalado el doctor Enrique Leobardo Ureña, delegado del IMSS en Quintana Roo.
Ante esto, el IMSS, lamentó esta pérdidas, e informó que una empresa ajena a ellos se encarga del mantenimiento de los elevadores; asimismo, acusaron al camillero que transportaba a la niña por homicidio culposo.
“Primero que nada, expresamos nuevamente nuestras sinceras y sensibles condolencias a los familiares de la menor; hechos que no debieron ni deberán volver a suceder”, precisaron.
Aseguraron que la familia tiene y tendrá total acompañamiento y apoyo durante este proceso. “Entendemos que nada será suficiente ante lo que pasó, pero haremos todo por encontrar justicia y buscar una reparación integral del daño”.
Separa IMSS a trabajadores
Asimismo, el IMSS tomó la decisión de separar del cargo a los funcionarios encargados de conservación y mantenimiento del Hospital, en tanto se realizan las investigaciones y se deslindan responsabilidades.
Además, se presentó una denuncia penal en contra de la empresa encargada del mantenimiento de los elevadores (SITRAVEM S.A. de C.V.), y demás personas que resulten responsables.
“Se otorgarán medidas emergentes para las necesidades apremiantes de los familiares, para cubrir gastos inmediatos. Lo anterior sin perjuicio de la reparación integral del daño en justicia de la menor y de las determinaciones de la autoridad”, se precisó.