La industria automotriz es responsable del 60% de la contaminación atmosférica de la capital mexicana, por ello se requieren alternativas más sustentables en este sector.
Algunas acciones se han llevado a cabo como el desarrollo de vehículos eléctricos; políticas urbanas para reducir el uso de automóviles y la inversión en el transporte público; pero todavía falta una eficiente coordinación entre estas acciones, como comentó Miguel Ángel Santinelli, director de la Facultad de Responsabilidad Social de la Universidad Anáhuac.
¿Qué acciones se pueden desarrollar en la industria automotriz para ser más sustentable?
Existen 50 millones de vehículos motorizados en México correctamente verificados en 2021, según Inegi, con 30 millones correspondiendo a automóviles particulares.
Los automóviles son útiles al realizar trayectos específicos que no cubren la red de transporte público, para desplazar objetos pesados y para el transporte de personas con problemas de movilidad.
Pero su uso masivo y generalizado provoca congestión vial en las grandes ciudades y contribuyen al aumento de las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI), como el monóxido de carbono (CO), dióxido de carbono (CO2), óxido de nitrógeno (NOx) y dióxido de azufre (SO2).
La industria automotriz es responsable del 18% de las emisiones globales de GEI a nivel mundial, de acuerdo con un estudio elaborado por Greenpeace en 2019.
Estos gases van directo a la atmósfera y causan un efecto invernadero, aumentando la temperatura en la Tierra. El PM, presente en el humo liberado por el tubo de escape, se encuentra suspendido en el aire de algunas zonas metropolitanas, como el Valle de México, donde representa hasta el 60% de la contaminación total aérea.
Automóviles híbridos y eléctricos, ¿una solución a largo plazo?
Gracias a que funcionan principalmente con energía eléctrica en vez de combustibles fósiles, los automóviles híbridos y eléctricos reducen sus emisiones hasta un 17% en comparación de las 4.6 toneladas de CO2 anuales liberados por un vehículo convencional, según la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos.
En cuanto a las emisiones dañinas para la salud, la Agencia Europea del Medioambiente señala que estos automóviles generan la mitad de contaminantes particulados a comparación de un vehículo que funciona con gasolina.
Sin embargo, estos vehículos también emiten CO2 de forma indirecta en sus fases de producción (51%) y de carga eléctrica (49%), por las emisiones generadas en la producción de electricidad. Además, si el manejo de las baterías al final de su vida útil no se lleva a cabo con cuidado, termina siendo un problema serio de contaminación ambiental, advierte el Instituto de Investigaciones en Ecosistemas y Sustentabilidad de la UNAM.
¿Qué acciones se ha implementado en México?
En México, las políticas urbanas y de transporte suelen favorecer y fomentar el uso de automóviles, afectando al resto de la población que no posee vehículos propios y depende del transporte público para movilizarse en las grandes ciudades.
Desde 1989, en la Ciudad de México se implementó el programa Hoy No Circula, limitando los días en que podían transitar los automóviles particulares para incentivar el uso del transporte público. No obstante, un informe del Centro Mario Molina de 2014 mostró que el parque vehicular aumentó un 3%.
La construcción de segundos pisos y viaductos es usada para aliviar la congestión vial, pero lejos de solucionar el problema, lo agravan a mediano plazo. Por ejemplo, a partir de la construcción del segundo piso en Periférico, el tráfico vehicular incrementó un 34% de acuerdo con la Coalición Cero Emisiones.
Antes destinadas a ser un juguete para niños, las bicicletas se han vuelto un ejemplo de transporte ecológico.
En la CDMX comenzó a extenderse la red de ecobicis (sistema de bicicletas compartidas) y las ciclovías (carriles paralelos a las arterias principales de circulación).
Sin embargo, la falta de una verdadera cultura vial pone en riesgo a las personas que se transportan en bicicleta. Tan solo en el 2020 se reportaron 685 ciclistas lesionados en accidentes vehiculares según la Confederación Patronal de la República Mexicana de la Ciudad de México.