La actual sequía en el Cuerno de África amenaza con dejar a 13 millones de personas en riesgo de sufrir hambre severa.
De acuerdo con un comunicado emitido por el Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la ONU, actualmente las regiones de Somalia, Etiopía y Kenia enfrentan la que podría ser la mayor sequía registrada en cuatro décadas en su territorio.
Esta situación provoca considerables daños a la producción agrícola y ganadera de la región, donde de por sí, las tazas de malnutrición ya son altas.
Por ello, el director del PMA para el este de África, Michael Dunford, señaló que se requiere de una ‘acción humanitaria inminente’.
De este modo y para enfrentar esta crisis en la región se aspira a recaudar 327 millones de dólares, cifra que permitirá ayudar a 4.5 millones de personas en los próximos seis meses.
La falta de precipitaciones es la que provocó la pérdida de cosechas e incluso una alta mortalidad del ganado, situación que podría empeorar, advierte la ONU.
A raíz de la sequía, el Gobierno de Kenia declaró una emergencia nacional en septiembre pasado. En ese país africano se estima que unos 2.8 millones de personas requieren de asistencia alimentaria.
Mientras, en Somalia se prevé que el número de personas clasificadas como gravemente hambrientas aumente de 3.5 millones a 4.6 millones en mayo a menos que se tomen medidas urgentes.