Luego de que el pasado 30 de diciembre un grupo de ‘influencers’ en un vuelo chárter entre Montreal y Cancún, llevarán a cabo una fiesta en un avión, el gobierno de Canada mostró su indignación.
El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, confesó estar “muy frustrado” con los videos, que posteriormente fueron borrados cuando estalló la polémica.
Trudeau declaró que los pasajeros, ‘influencers’ y participantes de programas de ‘reality TV’ de la provincia de Quebec, pusieron al personal de la aerolínea ”en peligro con su total irresponsabilidad”.
“Es una bofetada en la cara”, dijo el primer ministro canadiense.
Asimismo, pidió a los canadienses sacrificios para salir de la quinta ola del virus.
En las imágenes se ve a los pasajeros del vuelo sin mascarillas, bailando en el pasillo del avión, pasando botellas de alcohol y, al menos en un caso, una persona es llevada en volandas (crowd surfing) mientras el avión está en vuelo.
El propietario de la empresa que alquiló el avión para transportar a los pasajeros a un evento de seis días en Cancún, James William Awad, negó que se violaran la normas de seguridad o los reglamentos del COVID-19.
Sin embargo, canceló el vuelo de vuelta del grupo, que todavía se encuentra en Cancún. Otras compañías aéreas canadienses también se han negado a aceptar al grupo en sus aviones de regreso a Canadá.