Fueron ocho minutos y 35 segundos de discurso sin interrupción. El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, se explayó en su primera reunión en persona con su homólogo estadounidense, Joe Biden, y la traductora de Estados Unidos tuvo que hacer lo imposible para captar con exactitud cada una de sus palabras.
Los dos líderes empezaron su encuentro en Washington sobre las 15.40 hora local, unos 40 minutos después de la hora a la que estaba fijado, y tan pronto como la prensa entró en el Despacho Oval comenzaron las declaraciones.
Biden fue el primero con un discurso de cinco minutos y medio en el que repasó los lazos entre ambos países y expresó confianza en que la alianza con López Obrador demuestre que “las democracias pueden funcionar” ante el auge de modelos autocráticos como el chino.
Cada vez que Biden decía una o dos frases se paraba para que la interprete sentada a su lado pudiera traducir del inglés al español.
Ocho minutos y 35 segundos sin pausa
López Obrador, sin embargo, habló sin parar durante ocho minutos y 35 segundos sin hacer pausas para la traducción simultánea.
Durante ese tiempo, Biden se rascó la cabeza, se tocó varias veces la mascarilla negra que llevaba, echó un vistazo a sus notas, tomó un papel, escribió algo y lo puso en una mesa contigua; miró al suelo y, también en numerosas ocasiones, fijó la vista en su homólogo mexicano.
López Obrador, que mantuvo las manos entrelazadas durante buena parte del encuentro, dio las gracias a Biden por no tratar a México como patio trasero.
Además, repasó la historia compartida de las dos naciones, habló de la amistad entre Abraham Lincoln (1861-1865) y Benito Juárez (1858-1872), “el mejor presidente de México”, y dijo que su país quiere que avance en el Congreso la propuesta de reforma migratoria de Biden, que beneficiaría a muchos mexicanos que viven de manera irregular en Estados Unidos.
Durante todo ese tiempo, la traductora fue tomando notas a toda velocidad con un bolígrafo azul en una libreta de espiral.
La intérprete estaba apoyada en una mesa y se encontraba al lado de López Obrador, quien como Biden estaba sentado en un sillón de color beige.
A ver si puede: AMLO a la traductora
“Nos da mucho gusto estar aquí, presidente”, afirmó el presidente de México terminando su discurso. Fijó la mirada durante unos segundos en Biden y, enseguida, volteó la cabeza para decirle a la traductora: “A ver si puede”.
Ese comentario desató las risas entre los presentes, incluido Biden, y uno de ellos soltó: “Sí, ella puede hacerlo”.
A continuación, la intérprete tradujo del español al inglés las palabras de López Obrador y, como hablaba a un ritmo más rápido, redujo el discurso de más de ocho minutos a unos cuatro y medio.
El encuentro entre López Obrador y Biden se produjo en el contexto de la IX Cumbre de los Líderes de Norteamérica, que se celebró en la Casa Blanca, y en el que también participó el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau.
Con información de EFE