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El informe final sobre el desplome de la Línea 12 del Metro confirmó que la causa del desplome se debió a una falla estructural en la construcción y diseño original de la obra.
Este dictamen de la empresa noruega Det Norske Veritas (DNV) deja fuera la hipótesis de que este colapso se originó por problemas de mantenimiento tras el terremoto de 2017.
La conclusiones de este dictamen mantienen el foco en la construcción de la obra, llevada a cabo durante el gobierno de Marcelo Ebrard (2006-2012), hoy canciller, hombre fuerte del presidente y uno de los candidatos a la sucesión presidencial dentro de Morena.
Asimismo, liberan de culpas a Claudia Sheinbaum y a Miguel Ángel Macera, quienes se encargaron de los trabajos de mantenimiento tras el sismo.
Deficiencias en pernos
Los peritos de DNV enumeraron un puñado de deficiencias en los pernos y las trabes que sostenían el puente; el uso de diferentes concretos y soldaduras mal realizadas o no concluidas.
El secretario de Obras, Jesús Esteva, leyó el resumen ejecutivo del informe que incide en los problemas estructurales.
“Se detectaron deficiencias en comparación con el criterio de diseño en todas las porciones de las estructuras de concreto que se probaron: varias muestras cayeron por debajo de los criterios mínimos especificados en las normas”, señaló.
Y añadió: “Los resultados de los análisis indicaron que el colapso ocurrió como resultado del pandeo de las vigas norte y sur, facilitada por la falta de pernos funcionales en una longitud significativa, lo que causó que parte del tramo elevado perdiera su estructura compuesta”.
Deficiencias antes del terremoto
El informe también establece que “la estructura ya se encontraba en una condición comprometida antes del terremoto de 2017, y no como consecuencia del terremoto”.
El resumen ejecutivo del informe de DNV, que entregó oficialmente el peritaje luego de un par de semanas de retraso, indica que “los factores que contribuyeron a la falta de funcionalidad en los pernos incluyen pernos con soldaduras deficientes, pernos faltantes, y pernos mal colocados”.
“Los posibles factores que contribuyeron al colapso incluyen deficiencias en las propiedades mecánicas de la viga y en el diseño del marco transversal que no cumplió con los estándares del diseño aplicable”, añade DNV.
La rehabilitación de esta Línea 12 estará a cargo de Carlos Slim, cuyas empresas participaron en la construcción.
La participación de Slim en la reconstrucción se anunció a finales de junio, tras una reunión del empresario con el presidente del Gobierno, Andrés Manuel López Obrador.
Decepcionados
Teófilo Benítez Granados, abogado defensor de las víctimas de la Línea 12 del Metro, manifestó su decepción por los resultados que arrojó el dictamen de la empresa DNV.
Visiblemente indignado, acusó al gobierno federal y local de mostrar, desde un principio, desprecio hacia las víctimas, nula empatía y falta de compromiso.
“Pusieron más empeño en mantener su estabilidad política y poco compromiso para la reparación integral de las víctimas”, agregó.
