La salida de Raymundo Martínez Vite de la alcaldía Tláhuac y su complicidad con el actual gobernante, Ernesto Romero Elizalde, dan por hecho que habrá impunidad y no se castigarán todas las irregularidades que e le achacan a la pasada administración morenita.
A lo largo de estas semanas, vecinos se han manifestado en redes sociales por la falta de servicios públicos y cero atención a los reclamos cotidianos.
Ante esta situación, el Congreso local tuvo que intervenir por medio del diputado Federico Döring, quien ha alzado la voz en contra de los abusos y actos de corrupción que han marcado al gobierno de la familia Vite.
“Nos han buscado y dicho los vecinos que tienen información de que Martínez Vite esta operando y ha puesto todo su capital político a favor de Alejandro Durán para hacerlo ganar la elección en traición a Morena por no dejarle nada en esta elección”, dijo Döring.
Con Ernesto Romero Elizalde los vecinos tienen más preocupación de salir a la calle por la creciente inseguridad; además de que hay obras inconclusas y baches que nunca se atendieron.
“Raymundo Martínez Vite le vio la cara a Claudia Sheinbaum y nunca defendió ni procuró la Cuarta Transformación en Tláhuac; al revés, les dio poder a sus compadres de otros partidos para hacer negocios”, narró un militante de Morena.
Al respecto, el diputado Döring advirtió que seguirá en su lucha por defender a los vecinos de Tláhuac que buscan acabar con la dinastía Vite, que tanto daño le ha hecho a esta alcaldía.