El médico hondureño Pablo Enrique Ulloa Cáceres falleció hace ocho meses luego de atender en primera línea a pacientes de COVID-19.
Su hermano, Daniel Enoch Ulloa, lo recordó durante las vacaciones de Semana Santa en Twitter de una manera poco usual.
“Espero se hayan tomado bonitas fotos en la playa y las guarden. Esta fue la última foto en vida que vi de mi hermano médico que murió por cuidar de imbéciles como ustedes”, escribió.
El médico era originario de San Isidro en Santa Cruz de Yojoa y era director de las Clínicas Periféricas de Emergencia (Clíper) en la capital. También laboraba en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Escuela.
Espero se hayan tomado bonitas fotos en la playa y las guarden. Está fue la última foto en vida que ví de mi hermano médico que murió por cuidar de imbeciles como ud. pic.twitter.com/v9Fe1T4CnC
— Daniel Enoch Ulloa (@deulloac) April 3, 2021
Tras el mensaje del hermano del médico fallecido, las reacciones no se hicieron esperar. Algunas fueron de apoyo y otras de rechazo.
“La gente está en su derecho de salir y enfermarse, los médicos públicos están en la obligación de atenderlos, o si no pueden, renunciar cuando quieran. Yo siendo médico y viendo la situación del país hace tiempos hubiera renunciando”, fue una de las respuestas.
Otros dijeron que falta “sentido común (…) no pueden prohibir la circulación, pero basta con tener un mínimo de sentido común para darse cuenta que se pueden contagiar. Gracias a ese ‘derecho’ de circular la gente hace lo que quiere y no hemos ni salido del primer brote de COVID!”.
Honduras supera las cuatro mil 700 muertes por COVID-19 y los 193 mil casos.
Pese a que Honduras se encamina a una nueva ola de Coronavirus, la tercera en la pandemia, más de 30 centros de triaje han cerrado en los últimos días en el país debido a la falta de presupuesto.
Con información de El Universal