Esténtor Político
La temporada de zopilotes está a todo lo que da en San Luis Potosí, una de las entidades que le sigue quedando al Revolucionario Institucional y que ahora la Coalición ‘Sí por San Luis’ se apresta a retener en la contienda electoral del próximo junio 2021. A pesar de esto los enemigos de un adelantado triunfo podrían estar dentro del mismo gobierno estatal con Alejandro Leal Tovías y Aureliano Gama Basarte, secretario y subsecretario de Gobierno, funcionarios a los que se les está viendo como los hombres desleales y malos operadores del buen gobierno que ha tratado de llevar el gobernador priista Juan Manuel Carreras López.
Y esto es así porque este jueves 7 de enero se cumplen 17 días del plantón que instalaron comisiones representativas de miles de potosinos, para exigir que ambos funcionarios cumplan con los compromisos firmados y plazos acordados para la solución concreta a demandas de servicios básicos y obra pública de primera necesidad planteadas desde el inicio del 2020 que recién terminó y que el propio gobernador dio instrucciones a ambos funcionarios para que atendieran tan apremiantes y sentidas peticiones de mexicanos de ese estado, tierra del reconocido poeta potosino, Manuel José Othón.
Las peticiones para el poder que tiene un gobierno estatal, si hubiera voluntad, son muy sencillas de atender: conclusión del trámite de regularización de la colonia Buenos Aires, en Ciudad Valles; apoyo al campo con implementos e insumos agrícolas, trilladoras, sembradoras, remolques ganaderos; construcción de líneas de conducción de agua potable, pavimentación de caminos y tramos carreteros, así como un programa para el mejoramiento de la vivienda.
También solicitan la introducción de los servicios de agua de potable y de drenaje para tres colonias: Margarita Morán Veliz, Héroes de Chimalhuacán y Luis Córdova Reyes; pavimentación de calles para los municipios de Mexquitic, Villa Hidalgo y Charcas; obras de agua y drenaje para los municipios de Villa de Arriaga, Santo Domingo y Villa de Ramos.
Alejandro Leal y Aureliano Gama parecen no servir ya al gobierno de San Luis Potosí; los oídos sordos ante el justo reclamo social han hecho que líderes sociales y al menos una decena de presidentes municipales soliciten la intervención del gobernador Juan Manuel Carreras y esperan pronto una respuesta positiva; alguien también debería decirle a los funcionarios que para junio no hay nada seguro y es mejor que la población los vea como buenos políticos y no como un estorbo para la administración priista o para la Coalición.
En San Luis Potosí los pleitos de los distintos aspirantes a las candidaturas a gobernador para el 2021 están al día; ya los priistas ayer le dijeron al Presidente nacional del PRI que él decida quién será el elegido. Pero los cristales no sólo brincan y rebotan en este instituto político. Hace unos días los empresarios en voz del presidente local de la Coparmex, Julio Cesar Galindo Pérez, “dio un manotazo en la mesa” para exigir a los aspirantes del PAN a la gubernatura, Xavier Nava Palacios, Octavio Pedroza Gaitán y Marco Aurelio Gama, que cesaran los mutuos ataques –ya que se están dando hasta con la cubeta–, que se centraran en su campaña interna y que firmaran un pacto de civilidad en caso de no ser elegidos como el abanderado de ese partido.
En el PRI, como decíamos, ya la cosa será más fácil y el candidato será designado desde arriba, suenan cinco aspirantes, entre ellos Enrique Galindo Ceballos, ex comisionado de Seguridad de la Policía Federal con el gobierno de Enrique Peña Nieto. En Morena, dicen, todo indica que hay enojo de Alejandro Leal Tovías porque le sacaron de la jugada y de la competencia a su gallo a la candidatura a gobernador por Morena, al magistrado Juan Ramiro Robledo. Pero los potosinos que siempre se informan por algún medio le piden al Secretario de Gobierno que se ponga a atender a los manifestantes que hoy cumplen ya más de dos semanas en la Plaza de Armas. Tanto que en las voces de las carpas del plantón ya lo conocen más como don Alejandro (Des) Leal.
De los suspirantes del PRD, nada se destaca y nada les embona, pero la alianza camina y todo se tiene que ir alineando; cada partido y su candidato, con su propia fuerza política, tendrán que mostrar que son dignos de encabezar la candidatura para gobernador de SLP. La tarea de la Coalición es que Morena no tome el poder en SLP y por eso a don Mario Delgado se le ve muy preocupado y ahora tiene que mover sus piezas porque hace unos días la Dirección Nacional morenista acordó que su abanderado será una mujer.
Parece que también hay molestia porque se buscaba una coalición con el PVEM local para impulsar un candidato a gobernador y no quisieron; ahora tampoco quieren a una dama, pues su ambición personal es más grande.
En SLP Morena es el mismísimo espejo de los pleitos que vemos a diario en todo el país. Si no hay mayores pleitos entre los panistas, la coalición saldrá bien librada para dar con éxito la batalla electoral del 2021. A los morenistas se les ve divididos, apedreándose a todo lo que dan en medios y ahora hasta en tribunales electorales, les irá muy mal. Al final parece que la contienda quedaría entre la Coalición ‘Sí por San Luis’ vs el PVEM, encabezado por Ricardo Gallardo Cardona, quien se le acusa de nexos con la delincuencia organizada, pero muy amigo de Mario Delgado, que promovió la alianza a nivel local Morena-PVEM por las diputaciones federales de las que obsequió seis de siete candidaturas.
Pero antes de todo. El gobernador potosino, Juan Manuel Carreras, deberá mostrar habilidad política y sensibilidad para atender las necesidades de los potosinos pobres que encabeza el líder social y diputado federal Lenin Campos y varios presidentes municipales, que muy respetuosamente le han solicitado atienda peticiones de obras y servicios para sus comunidades y pueblos; eso ayudará a la Coalición y también se dará un paso hacia adelante en la brecha de desigualdad que señala el Coneval existe en San Luis Potosí. De acuerdo a la desastrosa experiencia nacional, sería una desgracia para ese estado que lo gobernara un morenista o alguno de sus aliados. De Alejandro (Des) Leal y Aureliano Gama mejor ni seguimos hablando, porque ellos, sí se portaron mal. Por el momento querido lector es todo.