Esténtor Político
¿Qué México tenemos en la actualidad?, ¿qué gobernantes tenemos? y a ¿qué nos enfrentamos y enfrentaremos en el 2021? La respuesta todos la tenemos a la vista: una cifra muy alarmante de cientos de miles de muertos, la mayoría por COVID-19, pero también otros tantos por la inseguridad y violencia, y muy seguramente también por la falta de alimento de muchas familias, incluso, se podría hablar hasta de una hambruna generalizada en las zonas más pobres del país. Eso sin tomar en cuenta que la crisis económica se ahondará y la situación política, por las elecciones 2021, también complicarán el panorama.
Hoy quiero referirme en este espacio a un aspecto de la crisis sanitaria. Según fuentes muy seguras, pero que se guarda el anonimato por seguridad de ellas, en las últimas horas el gobierno morenista de la CDMX, que encabeza Claudia Sheinbaum, dio la orden de que en ningún hospital de la Metrópoli se reciban a pacientes contagiados por COVID-19 que vengan del Estado de México o de alguna otra entidad; para atenderlos les piden identificación y al no acreditarse como de la CDMX de inmediato son rechazados, aunque exista espacio.
Pero además hay otra orden que se debe cumplir al pie de la letra, -debido a la saturación de hospitales del IMSS, el 95% en el Estado de México y de 86% en la CDMX-, a los familiares de contagiados, radicados en la misma ciudad, se les esté diciendo que los lleven a hospitales de otros estados como Hidalgo, Estado de México o Puebla.
¿Es en serio?, ¿el gobierno morenista de la Ciudad de México está dando esa orden? Sí, es en serio. Así están las indicaciones y las fuentes pidieron el anonimato por temor a represalias. Todo está claro y Morena en la capital ha tenido la autorización del gobierno federal: primero, para que se declarara tarde el semáforo rojo y aguantar hasta el último momento; ese aguantar es que la gente muera porque ya no hay espacios en hospitales; ese aguantar es que la gente se muera en sus casas o en las ambulancias, como ya sucedió el día de ayer, al menos en un caso; segundo, para, según, cuidar la economía que tanto preocupa (sic) al presidente mexicano López Obrador.
Hoy Hugo López-Gatell declara semáforo rojo en la Ciudad de México y en el Estado de México. Sin embargo, lo que se debe hacer es que la morenista Claudia Sheinbaum tome medidas adicionales como destinar recursos económicos para hospitales provisionales con las condiciones para atender enfermos y garantizar la salud de los capitalinos; por otro lado, garantizar que las familias que se encierren tengan qué comer, de lo contrario nuevamente regresará la denuncia de “En casa y sin comida”.
Es claro que de no reducirse el nivel de contagios durante las tres semanas que se declara emergencia, en el mes de enero se tendría el pico máximo de saturación de hospitales en el Valle de México, eso ha sido advertido por Víctor Hugo Borja, director de prestaciones médicas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), además de que ya hemos visto como en los últimos días, los contagios por día están entre 11 y 13 mil personas; es decir, podría hablarse de que cada semana hay en promedio 100 mil contagios, cada hora entre 400 y 500 y cada minuto entre 6 y 7 contagios. Y esto es sólo tomando en cuenta las cifras oficiales.
El Gobierno de la Ciudad de México y el Gobierno Federal son responsables de la salud de los mexicanos. Claudia Sheinbaum parece que está de acuerdo en dejar morir a enfermos de COVID-19 al prohibir que se acepten contagiados en los hospitales de la «gran metrópoli», donde se supone se concentra el mayor número de hospitales y de mejor calidad de todo el país. Claudia Sheinbaum podría ser cómplice de las muertes de miles de mexicanos que no se les atiende en hospitales al negarles el ingreso, aún cuando existan espacios. Por el momento, querido lector, es todo.