Parte del humedal “artificial” que se localiza en Xochimilco, en la zona en donde se construye un distribuidor vial, ya fue trasplantado al Parque Cuitláhuac, en Iztapalapa, en donde se construye uno nuevo, informaron autoridades capitalinas.
“Es importante mencionar que cerca de 12 mil metros cuadrados de tule fueron trasplantados al Parque Cuitláhuac y ahí, en próximos días, se les presentará el humedal que se está creando en Cuitláhuac”, señaló el secretario de Obras, Jesús Esteva.
En tanto, el resto del humedal será mejorado y ampliado, pues actualmente en esta zona sólo hay un vaso regulador, según la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum.
Parte de estos trabajos incluyen movimiento de tierra, plantación de vegetación endémica y la conexión del humedal con el Corredor Ecológico de Canal Nacional, con el Parque Ecológico Xochimilco, la zona chinampera y el Canal de Chalco.
“En realidad, antes era… bueno, fue un humedal que, como lo planteamos en su momento, es un humedal que se construyó cuando se hizo la ampliación del Periférico y era un humedal porque había agua y vegetación, pero funcionaba más como un vaso de regulación y hoy realmente el proyecto completo, pues realmente va a ser un rescate de diversas especies vegetales de la zona y, obviamente, pues inclusive hasta axolotes va a poder haber en este humedal”, destacó la jefa de gobierno.
De igual forma, la administración capitalina construirá otro humedal artificial en el Zoológico de Chapultepec, en donde antes se encontraba la casa de los elefantes. Ahí también se edificará un Museo del Axolote.
Todo esto, a decir de la jefa de gobierno, forma parte del compromiso de su administración con el medio ambiente y la preservación de las especies.
Vecinos rechazan proyecto
Sin embargo, la Coordinación de Pueblos, Barrios Originarios y Colonias de Xochimilco rechazó esta propuesta de mejora al humedal al considerar que no atiende el problema esencial del tráfico inducido y contaminación que producirá el distribuidor vial.
Señalaron que lo presentado no contempla los impactos indirectos que va producir la urbanización ligada al puente vehicular como la entrada de otros proyectos, plazas comerciales, torres de viviendas, oficinas, entre otros.
“La estimación de los estudios es que de seguir este paso de urbanización en el 2030 desaparecerá por completo la superficie ecológica de Tlalpan, Tláhuac y Xochimilco. El puente es solo un elemento que contribuye aun más al rápido crecimiento, tal y como ocurrió con la ampliación en Periférico en los 90s”, sostuvieron en una carta pública.
Asimismo, precisaron que el humedal que actualmente hay en la zona no es artificial, y que su exigencia es una restauración integral de la zona lacustre en todos sus niveles: en las descargas de aguas negras en canales, en la calidad de agua, en el freno de la urbanización en todas las áreas.
“No queremos que se destruya el humedal para ‘construir’ un proyecto de infraestructura que producirá justo el efecto contrario: mayor urbanización y aceleramiento de la desaparición del suelo de conservación y del territorio de los pueblos originarios”, señalaron