Esténtor Político
Mientras la morenista Claudia Sheinbaum, Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, se le ve muy «movida» realizando algunas acciones, al menos para que los capitalinos no vayan a empezar a protestarle con que en la metrópoli no se hace nada por los contagios del Covid-19, en algunas alcaldías la situación se complica por culpa de sus titulares. Por lo pronto, en la CDMX ya es considerada como «roja» al registrarse mil 686 pacientes positivos, mil 364 casos sospechosos y ya supera las 100 defunciones.
En una de sus alcaldías, Tláhuac, que históricamente ha sido el «ojo del huracán» por la inseguridad, narcomenudeo y en recientes semanas por la escasez de agua, el alcalde morenista Raymundo Martínez Vite ha sido cuestionado y criticado; tanto, que su presidencia en medios el 65% de las menciones son negativas.
Martínez Vite, desde que llegó a gobernar ha tenido problemas de todo tipo, pues aparte de los altos índices de inseguridad y de la venta de gas LP robado en las inmediaciones de la alcaldía, ahora está partidizando los apoyos a la ciudadanía, y esto donde alcanzan a llegar las pipas, porque hay decenas de colonias que el apoyo de agua potable es totalmente ausente en lo que lleva la contingencia.
No hace mucho que Vite fue muy criticado porque mostró su rostro inhumano al forzar a brigadas para que salieran a la calle sin los insumos necesarios y suficientes contra el coronavirus; por ejemplo, no llevaban caretas, cubrebocas, guantes, incluso ni lo más elemental como gel antibacterial.
Y a decir verdad, algunas acciones que tienen buena intención al realizarse, están resultando a todas luces insuficientes; es cierto que hay servidores públicos que han salido a visitar a sus vecinos, por ejemplo, a entregar pipas de agua; pero también hay gente cercana a Ernesto Romero Elizalde, Director de Participación Ciudadana, que ha entregado los apoyos, seguramente por instrucción de su jefe, a grupos específicos, y a colonias como Atotonilco, Tempiluli, La Conchita, San Ignacio y una parte de La Estación sólo se les ha amenazado de que si continúan agrupados en el Movimiento Antorchista no les darán agua; ese es el gobierno de «Primero los pobres».
Apenas hace unos días se supo y se rumora entre los habitantes que tanto el actuar de Martínez Vite, como su directora de Gobierno y Jurídico, son sospechosos porque hay indicios de que en la clandestinidad se están dando permisos a negocios a pesar de la contingencia del COVID 19.
En lugar de que el alcalde esté dando instrucción a sus funcionarios de menor nivel de que no se apoye con pipas de agua a tlahuquenses que no son son afines a él, parece no estar bien enterado de las medidas de salud, e ignora que por la contingencia sanitaria deben estar cerrados negocios como bares y antros en las colonias Selene, Nopalera, San José, La estación y Zapotitlán.
Quién pagará la irresponsabilidad del alcalde Raymundo Martínez son los vecinos de Tláhuac, porque es muy sospechoso que aunque ya la indicación de su jefa inmediata, Claudia Sheinbaum, es la de cerrar los negocios, él siga permitiendo que estén abiertos y que a pesar de que los vecinos ya se han quejado, el Instituto de Verificación Administrativa (Invea) no aparece por ningún lado. ¿Es que habrá complicidad del alcalde con los dueños de estos negocios? De un morenista todo se puede esperar, aunque se llene la boca diciendo que ya no hay corrupción.
El clímax no político… Más exigencia y denuncia en las redes sociales. #SinAlimentos es el hashtag, de los que realmente valen la pena tomar en cuenta querido lector, que esta tarde se colocó en la quinta posición de lo más mencionado en Twitter; por los mismos datos que la red social brinda, fueron alrededor de 50 mil mensajes de mexiquenses que reclamaron al gobernador priista, Alfredo de Mazo, atienda a los ciudadanos que en esta pandemia no tienen qué comer, pues lo poco que habían guardado ya se les acabó.
El famoso «Quédate en casa» trajo un problema más para todos los mexicanos y es: ¿quién dará dinero a las familias para comida, pues estas se han quedado sin empleo?. Don Alfredo del Mazo se ha caracterizado por ser un gobierno priista muy cercano al morenista López Obrador y, por eso, también se ve que tiene en mente ignorar a la población que lo llevó al poder. Lástima, porque él será el último gobernante de la dinastía de Atlacomulco. Por el momento, querido lector, es todo.