En la Ciudad de México se podrá conocer en tiempo real la cantidad de lluvia que cae gracias a un sistema de alerta creado por el Instituto de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Adrián Pedrozo, responsable del proyecto explicó que no se trata de un pronóstico de lluvia, sino observación en tiempo real de cuánto ha llovido para conocer las posibles afectaciones (encharcamientos o inundaciones) y así poder actuar.
“El observatorio difunde los lugares en donde llueve y la cantidad; de este modo, podrán prevenirse los desastres causados por las precipitaciones y mantener a salvo a los ciudadanos; además, las autoridades contarán con más herramientas para la toma de decisiones”, comentó.
Este sistema de alerta de lluvia en tiempo real ya funciona en 10 puntos distintos de la Ciudad de México: Ciudad Universitaria, Coapa, Bosque Real, Vista Hermosa, Dos Ríos, Memetla, Preparatoria 4, en las oficinas del Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex) en el centro de la ciudad, en Aragón y la Planta Potabilizadora de la Presa Madín.
Cada uno de estos puntos tiene autonomía energética, se alimenta de un panel solar y una batería para dar soporte las 24 horas.
Adrián Pedrozo comentó que este es un proyecto del Observatorio Hidrológico (OH) y surgió como respuesta a una necesidad de muchas ciudades en el mundo para atender emergencias por la lluvia y adaptar el drenaje cuando exista una precipitación de alta intensidad en un lapso muy corto.
Los datos recopilados por este sistema se conocen mediante tres vías: desde Internet, ingresando a la página del Instituto de Ingeniería (www.oh-iiunam.mx); alertas vía Twitter en la cuenta @OH_IIUNAM; y por correos electrónicos que se envían a las autoridades del Sacmex y a la Comisión Nacional del Agua (Conagua), organismo que desde 2016 incorpora los datos generados en el observatorio a su toma de decisiones.
«El equipo que tenemos mide la cantidad de agua que cae durante una lluvia, minuto a minuto, y el tiempo es importante para determinar qué hacer con el drenaje profundo de la Ciudad de México».
¿Cómo funciona?
Mediante un disdrómetro (medidor) óptico láser se hace un conteo de las gotas de agua, la velocidad con la que caen y la energía cinética que producen. Esa información llega a una microcomputadora de bajo costo.
Es la primera vez que se utiliza, para ingeniería hidráulica, un equipo que cuesta 10 dólares. Sustituye a los que las empresas venden en dos mil dólares”, indicó Jorge Magos, quien también forma parte de este proyecto.
Estos datos se envían a un servidor y desde ahí son transmitidos: “En menos de un minuto la estación hace la medición y se manda por Internet”.